SERVICIO DE AYUDA A FAMILIAS
Problemas con los hijos
Problemas con los hijos
Con el proceso de crecimiento de los hijos e hijas llegan edades con mayor complejidad, una de ellas sería la adolescencia, un periodo de nuestra vida como padres en que es habitual encontrarnos con diferentes problemas. La adolescencia de nuestros hijos e hijas siempre nos pilla por sorpresa; aparecen dificultades en las relaciones que durante la infancia habían estado ocultas; con frecuencia nos desbordan (“no sé qué hacer”).
Tanto en la adolescencia como en cualquier etapa, préstamos ayuda frente al bulliyng, el sexting, el grooming, u otras situaciones de violencia, acoso o abuso a través de las redes sociales; situaciones de absentismo o abandono escolar; trastornos del sueño o de la alimentación. Desde la Fundación podemos ayudarte.
Estas situaciones afectan a nuestras relaciones personales y familiares. De ahí la importancia de fortalecer las competencias de los padres y las habilidades de los hijos e hijas para afrontar juntos los problemas y convertirlos en retos.
La Fundación Alamedillas te presta el apoyo de profesionales expertos en el trabajo con menores, jóvenes y con sus familias.
Podemos identificar adecuadamente los problemas y acompañar en la búsqueda de soluciones.
Posibles problemas
Anda en malas compañías – No sé lo que hace
Es habitual que nos preocupemos porque no sabemos lo que hacen cuando no están con nosotros.
A veces sabemos poco de sus amistades, pero no nos gustan, pensamos que son mala compañía.
Creemos que su novio o su novia no le conviene, que mantener esa relación le está perjudicando, está haciéndole ser peor persona.
Es muy conflictivo/a – se aísla
En ocasiones se refugian en su caparazón, aislándose. Se encierran en su habitación y no se relacionan con nadie.
O su forma de relacionarse con los demás es tan agresiva que genera situaciones de conflicto grave o de violencia que dificultan la convivencia social. Se pueden desarrollar conductas de riesgo que bordean la legalidad y, en situaciones extremas acaban en intervenciones policiales y en medidas judiciales.
Tiene problemas en el colegio
Algunos adolescentes cambian sus focos de interés, pasando a un segundo plano los estudios. Su desmotivación puede llevarles a importantes bajadas de rendimiento escolar, al fracaso escolar, al absentismo o incluso al abandono total de los estudios. En otras ocasiones están simplemente desorientados, sin una clara perspectiva de futuro.
Otros tienen algún trastorno del aprendizaje, que interfieren en el rendimiento escolar: trastorno de la lectura (dislexia), de la escritura (disgrafía), del cálculo (discalculia), del habla y del lenguaje, de la atención, de la actividad motora (hiperactividad, hipoactividad).
Podemos encontrarnos con que son víctimas de bullying, ciberbullying o sexting. O que son sus ejecutores.
Problemas con el alcohol, drogas u otras adicciones
Su necesidad de explorar el entorno, de nuevas experiencias y de aceptación por sus nuevos amigos les pueden llevar a iniciarse en el consumo de tabaco, de alcohol o de otras drogas.
Ese consumo puede ser experimental u ocasional, o puede llegar a ser problemático si se hace habitual. Puede ser abusivo o generar dependencia; situaciones que llevan a que se deterioren otros aspectos importantes de su vida: su salud, sus relaciones familiares o con sus iguales, sus estudios, sus prácticas deportivas, etc.
La adolescencia es un momento propicio para las adicciones, no solo al tabaco, al alcohol o a otras drogas, si no también al juego (ludopatía), al sexo, a la comidas, a la televisión, a internet, a las redes sociales o las nuevas tecnologías.
Problemas con el sexo
El establecimiento de nuevas formas de relación puede plantear dificultades de identidad sexual, de relaciones con personas de distinto sexo, o llevar a prácticas sexuales de riesgo, con el peligro de contagio de enfermedades de transmisión sexual o de embarazos no deseados.
Trastornos de la alimentación
Su cuerpo cambia. También tienen que habituarse a “convivir” con ese nuevo físico, y en ocasiones se generan problemas de autoimagen. En situaciones extremas puede aparecer vigorexia o trastornos de la alimentación, como la anorexia o la bulimia.
Problemas con las pautas, normas y límites
Hay adolescentes que descuidan sus pautas de descanso, alimentación e higiene; que trastocan todos los ritmos de convivencia de la familia, con unos horarios que dificultan la convivencia. Se saltan continuamente las normas y límites que se establecen, pretendiendo imponer sus propias normas a toda la familia.
Puede darse una pérdida de valores, o un trastoque de los mismos, que lleva a continuos enfrentamientos, llegando a darse episodios de agresiones físicas (violencia ascendente).
Otras dificultades
Otros adolescentes van teniendo cuerpo de adultos, pero pueden seguir teniendo problemas de control de esfínteres o dificultades para conciliar el sueño.